jueves, 20 de agosto de 2009

No sé

Tengo un montón de secretos, o en realidad solo dos o tres. No sé.
La mayoría dejaron de serlo, esta manía de que debemos sincerarnos todo. -Esos son los que mas guardé, nadie quiso quedarse con ellos-

¿Por qué nos empeñamos en quererlo todo?
Si total, luego a nadie sabemos querer.
Nada sabemos hacer bien.
Miles de noches con poca cosa.
Pepinillos, cervezas, y las risas de fondo.
Aún recuerdo tus manos rápidas, tapando la foto
de cuando supiste que todo estaba al revés.

Teníamos que celebrar que estábamos juntas en esto.
Pronto fuimos La parada de los monstruos.
¿Te acuerdas, niña?
El mundo ya no pudimos arreglarlo cuando te fuiste.
De hecho se terminó de romper.
Tu cuarto vacío, tu madre en tu cama...
Desde entonces ya no sé querer.
O sí, yo que sé.

1 comentario:

huelladeperro dijo...

El mundo ya no tiene arreglo, era un trabajo excesivo hasta para vosotras.

Tu amiga... ay!
Déjame llorar contigo este dolor..